Desvelado el antiguo lugar del Carcelero entre los Eternos

¡Atención Spoilers! Muchas teorías había hablado sobre este tema y por fin es desvelado el antiguo lugar del Carcelero entre los Eternos.

¡Atención Spoilers! Este diálogo aparece tras finalizar la Campaña de Cadenas de Dominación.

La Campaña de Cadenas de Dominación llega a su fin esta semana con el último capítulo y tras finalizarlo, tendremos una conversación que revelará dónde estuvo Zovaal antes de ser enviado a Las Fauces.

Desvelado el antiguo lugar del Carcelero entre los Eternos

Diversas teorías hablaban de cuál habría sido el antiguo puesto de el Carcelero.

Tras acabar la Campaña de Cadenas de Dominación, se confirma que el Carcelero era el Enjuiciador original.

Esta es la conversación que tienen Bolvar y El Prelado y en la que indica que Zovaal fue el Enjuiciador.

Alto señor Bolvar Fordragón dice: Prelado, lo que presenciamos en la cámara de la Enjuiciadora superaba…toda comprensión mortal.
El Prelado dice: En su día, Zovaal sirvió como Enjuiciador. Pero desafió la voluntad de los Primeros e intentó destruir el equilibrio del cosmos.
El Prelado dice: Por sus crímenes, despojamos a nuestro hermano de su poder y lo encerramos en Las Fauces. Fui yo quien inscribió las runas de dominación en su carne.
El Prelado dice: Usamos el ánima de Zovaal para crear una nueva Enjuiciadora; una que fuera imparcial y justa.
El Prelado dice: Debería haber sabido que Zovaal nunca dejaría de luchar para recuperar su poder…y llevar a cabo sus terribles planes.
Alto señor Bolvar Fordragón dice: ¿Cuál será su siguiente paso?
El Prelado dice: Pretende hacerse con los secretos guardados en el Sepulcro. Si consigue el conocimiento que busca, la realidad que conocemos desaparecerá.
El Prelado dice: Los cuatro sigilos representan la esperanza renovada de las curias. Los usaré para forjar una llave… pero debo sustituir el sigilo de la Enjuiciadora con algo.
El Prelado dice: Seguid atacando a las fuerzas del Carcelero. Cuando la llave esté lista, os avisaré.
El Prelado dice: La muerte anhela el alma de tu mundo, mortal. Pero juntos, aún podemos salvarla.