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Retratos de Azeroth: Garona Semiorco

Garona Semiorco, quien en principio creía ser semihumana, es una asesina y espía medio orco, medio draenei. Fue emisaria de la Horda durante la primera invasión de Azeroth, siendo ella la mano ejecutora que acabó con la vida del Rey Llane Wrynn. Más adelante, ella y su hijo Med’an se unirían al Nuevo Consejo de Tirisfal en su lucha contra el culto del Martillo Crepuscular.

Orígenes

El nacimiento de Garona fue obra de Gul’dan, quien unió a uno de sus guerreros orcos con una draenei. La niña que nació adquirió rasgos bastante humanos para la sorpresa de todos. Mediante el uso de la magia, Gul’dan hizo crecer rápidamente a la criatura y la torturó, colocando también controles mágicos en su cabeza para asegurar su completa obediencia. Garona creció en los cuarteles con la gente de su padre, siendo odiada por el resto de orcos por ser diferente a ellos. Los insultos que recibía allí fueron los que la forjarían.
Al hermano de su madre draenei, el Vindicador Maraad, poco o nada le importaba que Garona fuera mitad orco, por lo que no dudó en buscar a su sobrina cuando supo que su hermana había dado a luz.

Garona aprendió bien la cultura de los orcos al haber viajado a lo largo y ancho de Draenor, lo que la hacía un activo de incalculable valor para el Consejo de la Sombra. Fue iniciada en el clan Cazatormentas, el cual estaba liderado por Gul’dan. Garona se convirtió rápidamente en la intérprete jefe del Consejo de la Sombra y en la espía y asesina personal de Gul’dan. Sin embargo, su lealtad no estaba depositada en ningún clan ni formaba parte de ninguno. Debido a su mestizaje, sería una paria durante el resto de su vida y solo podía confiar en sus habilidades para sobrevivir. Cuando llegó a Azeroth, su experiencia fue de gran utilidad contra su nuevo enemigo, los humanos.

Medivh

Garona fue a Azeroth con uno de los primeros grupos que atravesaron el Portal Oscuro y también una de las pocas que se enfrentaron al Guardián Medivh. Cuando su grupo fue aniquilado, Garona regresó para informar a Gul’dan. Tras un tiempo, volvió a encontrarse con el mago en diversas ocasiones. Más adelante se le concedería el título de Emisaria y sería enviada a Karazhan, donde se encontraría con Khadgar, el aprendiz de Medivh. Khadgar, aunque descontento con la presencia de la semiorca, trató a Garona con respeto tal y como su maestro había pedido que hiciera. Entre ambos formaron cierta confianza cuando un demonio apareció en la biblioteca de la gran torre y combinaron sus habilidades para derrotarlo, aunque no les detuvo a la hora de criticar la raza el uno del otro y defender la suya propia. Finalmente, Garona mencionó que los orcos habían llegado a Azeroth por el portal conocido como el Portal Oscuro.
Fue entonces cuando Garona comenzó a sentir un gran respeto por Medivh y, a causa de ello, también comenzó a preguntarse dónde residía su lealtad. El Guardián había satisfecho la curiosidad de la semiorca contándole todo cuanto ella deseaba, sabiendo que era una espía, Garona sintió que jamás traicionaría aquella confianza. Llegó a hacer el comentario de que aquel vínculo y aquella confianza la hacían sentir más «humana» y que sentía que Medivh tenía un gran sueño de traer algo mejor a aquel mundo. Tal vez fuera por entonces cuando ambos engendraron a Med’an.

Garona y MedivhDebido al extraño comportamiento de Medivh, Khadgar y Garona comenzaron a investigar y descubrieron una conexión entre el comportamiento de Medivh con una repentina llegada de orcos. Al usar un hechizo para evocar una visión del pasado, ambos descubrieron que Medivh era, de hecho, quien había llevado a los orcos a Azeroth, descubriendo así sus planes de asesinato. Aquello sorprendió a Garona en gran medida y, mientras que en un principio creyó que el hechizo había tenido algún fallo, comprendió finalmente que Medivh era quien había abierto el portal a los orcos. Tras una batalla contra Medivh en la que Khadgar empleó sus poderes para invocar una visión de Aegwynn que distrajera a su mentor, él y Garona escaparon poniendo rumbo al antiguo Reino de Azeroth.
Pese a una pequeña interrupción que sufrieron en el camino, finalmente se encontraron con Lord Anduin Lothar. Le contaron lo sucedido a Lothar y al Rey Llane Wrynn de Azeroth, pero Llane no creyó sus palabras. A pesar del escepticismo del Rey, Lothar se dio cuenta de que Medivh había enloquecido y un pequeño grupo se reunió y para poner rumbo a Karazhan y enfrentarse así al mago. Aquella misma noche, Garona vistió los colores de Azeroth tal y como Lothar le había pedido y se unió al grupo mientras éste se acercaba con grifos a la torre.

Buscando en los alrededores de la torre dieron con un pasadizo secreto, el cual les llevó a un reflejo especular de la torre donde Sargeras, la segunda sombra de Medivh, se hallaba. Fue entonces cuando Garona y Khadgar presenciaron algo que cambiaría a la semiorca. Karazhan le presentó una visión de su futuro que no pudo evitar mirar horrorizada, pues en ella asesinaba al Rey Llane durante el asedio contra Ventormenta. Durante unos instantes, Garona temía que aquello fuera a suceder. Llane era una de las pocas personas que la había tratado con gentileza y no deseaba matarle. Khadgar le zarandeó, sacándole de su estado de trance para que se centrara en lo que les ocupaba. Le dijo que, de ser cierta la visión, significaba que ambos saldrían de Karazhan con vida (pues Khadgar también había visto una visión de su futuro) y que, si era falsa, podía morir tranquila sabiendo que su destino no era traicionar al Rey Llane.

Cuando al fin dieron con Medivh, éste desató los poderes que tanto su madre como Sargeras le habían otorgado. яндекс. Garona, enojada por la traición de Medivh -y, quizá, esperando morir antes que vivir para ver cómo la visión se hacía realidad- atacó al mago, pero fue golpeada por un poderoso hechizo. Medivh estaba decepcionado y le hizo saber que esperaba que ella, por encima de todos los demás, entendería por lo que estaba pasando y no se le opondría. Tocó la frente de la semiorca con un conjuro, llenando su mente con las dudas y divisiones que había cargado. Garona cayó al suelo incapacitada y después, tras un largo combate, Medivh cayó a manos de Khadgar y Lothar. Sin embargo, al finalizar la lucha, Garona ya no estaba.

El Rey Llane y el regreso de Garona

Poco después de lo acontecido en Karazhan, Garona se convirtió en confidente del Rey Llane, pero debido a los juegos mentales de Medivh fue incapaz de formar una lealtad sólida. Informaba al Rey del funcionamiento interno de la Horda y cómo usarlo a su favor. Tras su «liberación» por las fuerzas orcas que asaltaron la Abadía de Villanorte, el Consejo de las Sombras le ordenó matar al Rey Llane. Percatándose de que su visión iba a convertirse en realidad, asesinó al Rey con un profundo pesar. El hijo de Llane, el príncipe Varian, fue testigo del asesinato y aun con el paso de los años no logró entender por qué el rostro de Garona estaba empañado en lágrimas. Por entonces, la semiorca estaba encinta de su hijo, Med’an.

Por aquel entonces, Gul’dan se hallaba en coma y Orgrim Martillo Maldito decidió usar la situación a su favor al matar a Puño Negro para alzarse como Jefe de Guerra. Sus espías encontraron a Garona y la torturaron casi hasta la muerte, hasta que finalmente reveló la ubicación secreta del Consejo de la Sombra. El Consejo fue destruido y casi todos los brujos aniquilados. Los espías de una facción desconocida siguieron buscando a Garona incluso tras la Segunda Guerra, pero la semiorca les dio esquinazo a tiempo para dar a luz a Med’an. Buscó a su amigo no-muerto, el mago Meryl Winterstorm, a quien le comentó el asesinato del Rey Llane y que era un peligro para su hijo, por lo que le confió el bebé a él. Tras decirle el nombre del pequeño, le pidió que nunca le dijera quién era su madre. Tras despedirse de Meryl, Garona desapareció de la faz de Azeroth, aunque mantendría un ojo puesto en su hijo.

Garona SemiorcoLa semiorca siguió vigilando a su hijo. Cuando Med’an fue atacado por un grupo del Martillo Crepuscular, Garona se interpuso y acabó con ellos, pero fue capturada por otros miembros del culto y llevada a Ahn’Qiraj. También habían conseguido atrapar a Med’an, pero logró escapar. Cuando llegaron a su destino, se encontró con la sorpresa de que Cho’gall seguía con vida y que sabía que Gul’dan había usado magia en ella para forzarla a hacer cosas en contra de su voluntad. Fue enviada a Theramore para matar al nuevo Rey de Ventormenta, Varian Wrynn, echando por tierra cualquier posible alianza entre orcos y humanos. Como objetivos secundarios, debía matar al príncipe Anduin Wrynn y al Jefe de Guerra Thrall. El ataque falló y Garona fue capturada por Jaina Valiente, mientras que Med’an volvía a ser capturado por el Martillo Crepuscular. Jaina y Aegwynn descubrieron que la semiorca se hallaba bajo un hechizo, pero no pudieron librarle de él sin causarle un gran dolor y, posiblemente, la muerte.
Mientras Valeera Sanguinar y Meryl Winterstorm habían partido para rescatar a Med’an, Garona fue liberada en secreto y rescatada por su tío Maraad durante un ataque de la Plaga en Theramore. Más tarde, Maraad le contó a la semiorca que su madre era su hermana y, por tanto, él era su tío. Mientras hablaban, Valeera, quien había estado buscando a Garona, les interrumpió e inició un combate. La semiorca escapó mientras Maraad la distraía hacia Med’an, quien había estado siguiendo a Valeera. Pese a que Garona estaba feliz por volverse a encontrar con su hijo, le explicó que no estaba seguro con ella hasta que Cho’gall estuviera muerto, pues él sabía cómo controlarla, y que se quedara entretanto con su tío. Tras ello, puso rumbo a Ahn’Qiraj para poder dar muerte al ogro. Aunque falló en su cometido, logró hacerse con la Base de Atiesh, lo cual sería necesario para que Med’an restaurara el bastón de Atiesh y, con su poder, logró derrotar a Cho’gall.
Garona, por otra parte, seguía siendo una fugitiva de Ventormenta, pero se enfrascó en la caza de los miembros que quedaban del Martillo Crepuscular, dejando que fuera Valeera quien le explicara al Rey Varian lo sucedido.

Garona marchó a Garganta de Sangre, en las Tierras Altas Crepusculares, para dar muerte a Cho’gall, quien había sobrevivido al ataque de Med’an, disgustada por el hecho de tener que confiar en videntes para lograr su objetivo. Un héroe de la Horda la acompañó junto a una delegación de élites Kor’kron. Sin embargo, Cho’gall atacó al grupo, deshaciéndose de los Kor’kron y dejando solos al héroe de la Horda y a Garona para sabotear la Ciudadela Crepuscular.
Tras liberar a Lirastrasza y ayudar al Anillo de la Tierra, Garona puso en marcha su venganza. Cho’gall se retiró al Bastión del Crepúsculo, dejando a un poderoso gronn para acabar con ella y su acompañante. Afortunadamente, la llegada a tiempo de Zaela, Lady Cozwynn y las fuerzas de los Faucedraco pusieron las cosas a su favor, logrando la derrota del gronn.

 

 

Written by Alherya

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!Dark Legacy Comics en español! EP #426-430

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