Yuki
¿Volar o no volar? Esa es la cuestión.
A lo largo de World of Warcraft hemos tenido una notable evolución en cuanto a las monturas tanto terrestres como voladoras a lo largo y ancho de Azeroth. Estamos a poco tiempo de comenzar la continuación de Mist of Pandaria, y el panorama de poder volar se diluye entre especulaciones y previsiones que nos hacen dudar de ello. Para entenderlo mejor, vamos a ver un poco lo que vivimos en expansiones pasadas con el tema de la monturas voladoras (y de paso las terrestres). Para ello, vamos a volver a la Classic, donde nuestras aventuras en el juego se basaban en interminables caminatas a pie hasta llegar al nivel 40 y conseguir nuestra ansiada montura de 60% de velocidad de movimiento comprando 
Aprendiz jinete por un coste importante en la época, (ahora tan solo cuesta 4 
). Al llegar al nivel 60, teníamos el segundo desembolso grande aprendiendo Oficial jinete por más de 500 en la época, actualmente siendo de tan solo 50 en una montura de 100% de velocidad de movimiento. Esto cambio en el parche 3.2.0 de la Wrath of the Lich King bajando la primera terrestre a nivel 20 y la segunda a nivel 40.
Pero vamos a pasar a lo que nos ocupa este artículo, el poder volar. En The Burning Crusade tenemos el primer gran cambio de World of Warcraft, la posibilidad de poder volar en la nueva Terrallende. Con la nueva posibilidad de Experto jinete adquiríamos algo totalmente nuevo como era poder volar al 150% de velocidad de movimiento por los aires al llegar a nivel 70, máximo de la expansión. Esto además de ser algo novedoso, era necesario, ya que para acceder a mazmorras como El Arcatraz, El Invernáculo o El Mechanar era necesaria. Por otro lado, una de las razas más beneficiadas de este cambio era los Druidas, ya que con su 
Forma de vuelo que aprendían al nivel 68, eran los primeros jugadores en poder disfrutar de ello y "gratis". El modo tope de voladora introducido en esta expansión era la de Artesano jinete, que hacía que la velocidad de movimiento aumentase al 280%, con un coste de 5000 ) que dio situaciones bastante inverosímiles como "Vender su virginidad por una montura épica voladora".
Entramos en Wrath of the Lich King, donde se añade un nuevo concepto especial para el nuevo mapa de Rasganorte, 
Vuelo en clima frío. Gracias a esto podríamos usar nuestras monturas voladoras en este mapa a partir del nivel 77 por un coste de 1000 . Aun así, a lo largo de esta expansión, esto sufrió cambios como 
Escrito sobre Vuelo en clima frío, para personajes secundarios, aunque fue removido del juego en Cataclysm. Aquí además se añadió un nuevo tope, Maestro jinete, lo que aumenta a 310% de velocidad de movimiento. Durante un tiempo además, se pudo obtener de modo "gratuito" este tope gracias al logro 
Ha sido un largo y raro viaje.
En Cataclysm, los cambios de monturas son menores, sobretodo en cuanto a bajadas de nivel. El único cambio grande que vemos es la posibilidad de volar dentro de Reinos del Este y de Kalimdor, en un Azeroth devastado por el cataclismo, gracias a 
Licencia de maestro de vuelo, que nos hará volar a nuestro nivel de equitación. Por el resto, básicamente se reducen niveles para aprender equitación. Y poco después entramos en Mist of Pandaria, donde se introducen tan solo 2 cambios: 
Sabiduría de los cuatro vientos a nivel 90 para poder volar sobre Pandaria, y 
Montar sobre dragón nimbo como un especial de equitación para este tipo de monturas.
¿Qué es lo que veremos en Warlords of Draenor? Como se ha podido ver en los comentarios en el artículo Volar en Wod, problemas Pegaso, app Bnet queda dicho que seguro que no podamos volar en la expansión mínimo hasta llegar a nivel máximo como pudimos ver en Mist of Pandaria. A la hora de implementar el modo de vuelo sobre Draenor, ya dicen que aun están en fase beta y que tienen que ver o estudiar el comportamiento de los jugadores hasta que el juego salga para valorar el momento idóneo para ello. Por suerte, sea pronto o tarde, al menos son conscientes de la preocupación de los jugadores respecto a moverse sobre el nuevo mapa o el "tiempo perdido" entre ir de un lado a otro. Estaremos atentos a nuevas noticias.
